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La Residencia de Señoritas, el grupo femenino de la Residencia de Estudiantes fundado en 1915 en Madrid bajo la dirección de María de Maeztu, fue la primera institución oficial en España dedicada a la educación superior de mujeres. Promovida por la Junta para Ampliación de Estudios (JAE), e inspirada en los ideales de la Institución Libre de Enseñanza (ILE), tenía como objetivo principal proporcionar a las mujeres acceso a una educación de calidad y fomentar su desarrollo intelectual y personal. En MujeResID hemos extraído y analizado los datos de los libros de registro de alumnas con las cerca de 3.000 mujeres que residieron o visitaron la Residencia combinados con los de otras diversas fuentes relacionadas con el objetivo de visibilizarlas. Mujeres pioneras, muchas anónimas, que abrieron camino en la educación superior igualitaria, iniciativa que se vio truncada en 1936 por el estallido de la guerra civil.

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El sinuoso camino hacia

la formación superior

Antecedentes

Fernando de Castro crea la Asociación para la Enseñanza de la Mujer

A finales del siglo XIX y principios del XX, España experimentó cambios en la educación y los derechos de las mujeres, impulsados por asociaciones feministas y movimientos reformistas que desafiaron la exclusión femenina de la educación superior.
La Institución Libre de Enseñanza (ILE), fundada en 1876 por Francisco Giner de los Ríos, fue clave para promover una educación moderna y laica que incluía a las mujeres. Aunque al inicio pocas mujeres lograron ingresar en la universidad, enfrentando fuertes resistencias, estos avances prepararon el terreno para la creación de la Residencia de Señoritas.

Congreso Nacional Pedagógico en Madrid. Entre sus propuestas, se presentan medidas relacionadas con la educación de la mujer, con un éxito moderado

Alumnas de la Asociación para la Enseñanza de la Mujer

Congreso Pedagógico Hispano-Portugués-Americano. La sección de educación y aptitud profesional de la mujer fue la más debatida. Destacaron Berta Wilhelmi, Emilia Pardo Bazán y Concepción Arenal.

Emilia

Pardo Bazán

Concepción

Arenal

Berta
Wilhelmi

Alice Gordon Gulick crea en Boston la Corporación del International Institute for Girls in Spain

El Instituto Internacional creado por el matrimonio Gulick se establece en Madrid, en la calle de Fortuny

Creación de la Escuela de Estudios Superiores del Magisterio en Madrid

El Instituto Internacional for Girls inaugura su nuevo edificio en la calle Miguel Ángel

Residencia
de Estudiantes

Sede del Instituto Internacional en la calle Miguel Ángel de Madrid

1915
Nace
la Residencia
de Señoritas

Se crea la Residencia de Estudiantes, que se aloja en la calle de Fortuny, 14

La Residencia de Estudiantes se funda en 1910. Cinco años después nace su grupo femenino, la Residencia de Señoritas. Fue una iniciativa de la Junta para Ampliación de Estudios e Investigaciones Científicas (JAE) y se convirtió en un importante centro cultural y educativo.

Derogada la Real Orden de 1888 que exigía a las mujeres un permiso especial para acceder a la Universidad. LIBRE ACCESO DE LAS MUJERES A LA UNIVERSIDAD .

El grupo universitario de la Residencia de Estudiantes se traslada a su sede definitiva en la calle del Pinar

Maria de Maeztu acabó Filosofía
y Letras en la Universidad
Central de Madrid en 1915
con premio extraordinario

Abre sus puertas el grupo femenino, la Residencia de Señoritas, dirigida por María de Maeztu.

Se instalan en dos de los edificios hasta entonces ocupados por el grupo masculino, en la calle Fortuny, 28-30

Mujeres en la Residencia

Residentes en la biblioteca de la Residencia de Señoritas en Miguel Ángel, 8, hacia 1930. Instituto Internacional en España

Mujeres que pasaron
por la Residencia

La Residencia de Señoritas experimentó un notable crecimiento desde su fundación en 1915 hasta 1936. Durante estos años, se convirtió en un importante centro de formación y de acogida de residentes matriculadas en diferentes instituciones educativas de Madrid. Mujeres de clase media y media alta, e incluso, algunas ayudadas con becas y con “préstamos de honor” en los últimos años, venían para hacer desde cursos, a estudios de educación media y superior. El número de residentes creció significativamente, directamente en correlación con el número de mujeres que accedían a la educación universitaria. Según la investigadora Raquel Vázquel Ramil (2012), en el curso 1914-1915 había 90 universitarias matriculadas en toda España, mientras que en 1932-1933 el número ascendió a 2.047, siendo la Universidad Central de Madrid la que tenía un mayor porcentaje de alumnas matriculadas, representando el 34,4% del total en 1915. Aun así, en los años 30, solo un 6% de las matriculadas en la universidad eran mujeres.

¿Qué hacían las mujeres en la Residencia?
Evolución de universitarias por disciplina
El magnetismo de la Residencia
Dos antiguas compañeras de la Residencia de Señoritas, la profesora del Instituto-Escuela Carmen Castilla (primera por la derecha) y María Díez de Oñate (segunda por la izquierda), con otras profesoras en la escuela de verano de Middlebury College, 1922
Atrajo a mujeres de casi
todas las zonas del país

Las residentes venían de todas partes de España, si bien el grupo más numeroso proviene de León. La dirección de la Residencia aprovechó la fuerte impronta y los valores de la Institución Libre de Enseñanza (ILE) en León, promovidos por la Fundación Sierra Pambley. La influencia krausista e institucionista, a través, entre otros, de Gumersindo de Azcárate, animó a muchas familias progresistas de la región a enviar a sus hijas a la Residencia, resultando en un número considerable de estudiantes leonesas en la institución.

Las residentes Herminia Adrados y Pilar Rosado de la Iglesia, ambas estudiantes
de Medicina, delante de uno de los edificios de la Residencia de Señoritas,
curso 1930-1931. Archivo familiar Bonet Rosado, Valencia
El foco internacional

Las residentes extranjeras representaban el 13% del total de mujeres (más de 400 residentes entre 1915 y 1936). La relación entre la Residencia de Señoritas de Madrid y los colleges estadounidenses de mujeres entre 1919 y 1936 fue muy fructífera. Se establecieron políticas de intercambio de estudiantes que promovieron el enriquecimiento cultural y académico de ambas partes, basadas en la solidaridad y el apoyo mutuo, con un enfoque en modernizar la educación de las mujeres y ofrecerles oportunidades internacionales. Fundados por mujeres y para mujeres, proporcionaban un modelo de educación avanzada y autónoma.
Las profesoras promovieron activamente becas e intercambios, lo que permitió a muchas españolas estudiar en Estados Unidos y viceversa. Además, estas políticas ayudaron a introducir en España métodos educativos modernos, como el énfasis en las ciencias experimentales, los idiomas y la educación física.
Susan Huntington, profesora del Instituto Internacional
La mayoría fueron europeas
y estadounidenses

Las extranjeras venían a la Residencia de Señoritas sobre todo a estudiar español y provenían principalmente de Estados Unidos, pero también había estudiantes de otros países europeos como Francia, Alemania y el Reino Unido. Este intercambio no solo enriquecía el ambiente académico, sino que también fomentaba una red internacional de mujeres profesionales y académicas.

Dorotea Barnés González trabajando en el Laboratorio
Innovación pedagógica

Equipo de hockey de la Residencia de Señoritas, años treinta. Instituto Internacional en España

El hub: de los
colleges a la vanguardia
pedagógica


El sistema pedagógico de la Residencia de Señoritas inspirado en los colleges internacionales, especialmente en los modelos británicos y estadounidenses se basaba en promover una educación integral que combinaba el desarrollo académico con la formación personal y social. La Residencia de Señoritas se convirtió en lo que hoy se denominaría como hub, un núcleo de intercambio interdisciplinar que impulsó el desarrollo de las residentes. No solo asistían a clases universitarias, sino que también participaban en una variedad de actividades extracurriculares que incluían conferencias, talleres, deportes y actividades culturales. La idea era fomentar un ambiente de aprendizaje continuo y multidisciplinar, donde las estudiantes pudieran desarrollar habilidades críticas y sociales, además de sus conocimientos académicos.
La Residencia también promovía la convivencia y el intercambio de ideas entre estudiantes y profesoras, creando un ambiente de comunidad y apoyo mutuo. Este enfoque holístico buscaba empoderar a las mujeres, preparándolas para ser profesionales competentes y ciudadanas activas en la sociedad.
En resumen, el sistema pedagógico de la Residencia de Señoritas era innovador, laico y progresista, buscaba formar mujeres independientes y preparadas para enfrentar los desafíos de su tiempo.

Grandes referentes
Victoria Ocampo con un grupo de residentes el día de su conferencia «Supremacía del alma y de la sangre» en la Residencia de Señoritas, Madrid, 9 de enero de 1935. Archivo Regional de la Comunidad de Madrid, Fondo fotográfico Santos Yubero
Mujeres referentes que pasaron por la Residencia

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